En
el año 1492, cumpliéndose el decreto llamado Edicto de Granada, los Reyes
Católicos expulsaron de Castilla y Aragón a los judíos, para impedir (según
este decreto) que siguieran influyendo en los cristianos nuevos para que estos
los judaizaran.
Unos años después también fueron expulsados del Reino de Navarra y del Reino de Portugal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario